Si has tenido el privilegio de ver un bebé recién nacido, has visto a Dios, lo has sentido; es ver, sentir, escuchar y un sin número de experiencias mas que son únicas de ese momento. Estas frente a la inocencia, frente a la bondad y al amor instintivo. Estas frente a inimaginables posibilidades de vida.
Todos los grandes hombres y mujeres de nuestra historia, alguna vez fueron un bebé recién nacido. Todos alguna vez fueron un humano en brazos, desesperados por el seno materno. Todos alguna vez fueron un pequeño lleno de posibilidades. Eso fuiste tu y eso fui yo. La posibilidad.
El adicto, el corrupto, el ladrón, el asesino, el miserable, el rencoroso, el Garavito, el cabecilla, el capo, todos ellos también una vez fueron ese bebé. La prostituta, la adolescente en el sitio web vendiendo su desnudez, el hombre y la mujer que venden su sexualidad en la red, también fueron el inocente bebé.
¿Quien eres tu hoy?, de las posibilidades de tu vida ¿quien eres tu?, mas allá de las circunstancias que no pediste, mas allá del mundo en que naciste ¿quien has escogido ser?.
El pasado nos tiene aquí y el futuro lo construimos nosotros mismos, hoy son las decisiones, decide hoy. El pasado nos enseñó y te preparo, pero no nos define. Podemos elegir, conectar los puntos de nuestra existencia y elegir que será de los que siguen; podemos usar el dolor de nuestra historia para el rencor o para perdonar y guiar a otros al perdón y la libertad, sobre derrumbes construir puentes, sobre divisiones unidad, donde hubo sequedad, manantiales de agua.
Aun vives, aun tienes posibilidades. Ese bebé que fuiste ¿quien te dice que quiere ser?.
Efesios 5: 29
Porque nadie aborreció jamás su propia cuerpo, sino que lo sustenta y lo cuida, así como también Cristo a la Iglesia